En otros tiempos, cuando los sueños todavía eran en blanco y negro, nadie podía imaginar otro enemigo público que no fuera James Cagney. La cara ancha del actor neoyorquino pondría rostro al gánster más peligroso surgido de los bajos fondos en el célebre filme de William A. Wellman. Su pelo ondulado y su mirada picarona... Leer más →
De la farsa al sainete
Marx señalaba con su característica mordacidad que la historia suele repetirse, primero como tragedia y luego como farsa. Estos días hemos tenido ocasión de comprobar como esta ley parece aplicarse no solo a los hechos históricos, sino que también tiene vigencia con los discursos. Lo hemos visto a propósito de la dimisión de Francisco Camps... Leer más →